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...
Sálvame y no te fallaré."
M26.
Realmente solo hay una razón.
Aunque no sea el motivo por el que te quiero,
es el que me hace saber que lo hago.
Creo que tampoco lo diré hoy.
...
A veces busco dentro de mi. Rebusco donde ya lo hice una vez.
Y no encuentro.
Otras veces me ahogo en mi propio oxígeno,
como si de una alergia se tratara,
como si el hecho de respirar me forzara a no hacerlo.
Alguna vez he sentido no poder seguir,
tampoco he querido.
He tropezado siete veces conmigo misma.
Y sé que lo haré una octava.
Hubo una vez en que intenté esquivar la piedra,
y vino una avalancha.
Aquella lección la aprendí bien.
Veces en que no he sabido ganar,
peleas nocturnas,
palabras en la garganta,
y yo no he hecho nada.
Me he visto morir en mis propios brazos,
he querido no existir para dejar el mundo a un lado,
casi me rindo.
Hace tiempo que no vienen las pesadillas,
que no me despiertan y les pido piedad de rodillas.
Ya no intentan colarse en mi cabeza,
huyen como si supieran que me has devuelto mi fuerza.
Pero esa fuerza es también mi debilidad,
y las jodidas lo saben.
Protégeme.
Sálvame.
Ya lo hiciste una vez..
Ya he desistido de los motivos y los porqués.
Me he dado cuenta de que es inútil.
Lo dejaré en que te quiero porque no puedo evitarlo,
y porque en el fondo sé.. y porque sé que tú..
Es adicción.
Te quiero, no lo olvides, ¿vale?
Eme.
Te quiero porque 65 palabras no son suficientes, ni 130,..
porque te mueres por saber qué sé en el fondo, y no te lo diré todavía.
porque saber que estás conmigo es el hilo que tira de mi cada mañana para salir de la cama.
Te quiero por cómo te ríes de mis tonterías,
porque das cuerda a mi corazón,
y porque sé que tú…
Por qué te quiero en 65 palabras..
Se me agotaron las palabras, 65 son muy pocas, ¿no?
M.
26F.
Aunque no es suficiente.
Recuerdo la última vez que lo intenté.
Todos tenemos alas.
Pero no debemos usarlas.
Esas alas solo pueden hacer volar nuestra imaginación.
Nada más.
Yo las tengo escondidas.
Mi chica las cuida cada noche.
Comprueba que todavía vuelan.
Les saca brillo.
Porque sabe que si fallan,
yo pasaré a ser nada.
A veces revoloteo a su alrededor,
me gusta hacerlo.
Ella vigila que no tropiece.
Me indica por dónde ir.
Otras veces se limita a tocarlas,
acariciarlas, rozarlas.
Incluso hay noches, ¡que se conforma con mirarlas!
Y después las pliega.
No sé qué sería de mi sin ella,
ni sin ellas.
Probablemente,
seguramente,
jamás saldrían solas estas letras.
-8
-9
No encuentro respuestas si no eres tu la que pregunta.
Siento que la noche se me cae encima, me domina. Juega con mis hilos de marioneta perdida.
Y no puedo hacer nada mas que sentir como todo gira.
Me meto en la cama y solo pienso en salir corriendo. Respirar no tiene sentido si tu no estas aquí dentro. Se queda todo frío sin tu sonrisa.. sin a penas darme cuenta tu ausencia me pisa.
Mientras la noche avanza, yo retrocedo, sentirte cerca es lo único que necesito y quiero.
Las peores pesadillas las sufro estando despierta, mientras el mismo Satán está llamando a mi puerta. No tiene mucho sentido escuchar a mi conciencia, nunca la he escuchado y ahora no tengo paciencia.
Todo está en coma desde que tu no estás, respiro de una forma artificial. Llevando en mis venas el peso de no poderte escuchar. Noto como se transforman los latidos en susurros pidiéndole al mundo que corra un poco. -o mucho.
Mi cama es una trinchera y soy consciente de poder morir en ella.
Cerraré los ojos, aunque te vea por dentro, solo pretendo dormir y me queda un intento.